El vestido de novia cuenta elementos imprescindibles, uno de tantos es la cola, que en el paseo hacia el altar y en el momento de la ceremonia acapara casi todas las miradas. A un gran vestido le acompaña una gran cola.
Cada novia merece un vestido con una cola particular. Hay tantos tipos de cola como estilos posibles. ¿Sabías que cada una recibe un nombre diferente? Aquí os dejamos las colas idóneas para uno de los días más importantes (y glamurosos) de vuestras vidas.
- Cola de novia barrido:
Es la cola que menos base tiene, la más corta; es como una pequeña prolongación de la falda que crea ligeramente la forma de la cola, pues apenas hay tela arrastrando por el suelo. Esta cola no está únicamente reservada para los vestidos de novia, pues también la solemos ver en trajes de invitada, de madrina, e incluso para otro tipo de eventos nocturnos que no tengas nada que ver con enlaces. El vestido Helga de la última colección de Penhalta está confeccionado para las novias que busquen un vestido con la cola barrido.
- Cola de novia capilla:
Su longitud es la más común entre los vestidos de novia. Esta cola sencilla mide un metro y medio aproximadamente, contando desde la parte baja de la cintura hasta el suelo. Este estilo de cola se acerca más a la elegancia informal de un día especial de esta índole. El vestido Hebe cumple con todos estos requisitos.
- Cola de novia catedral:
Nacen de las faldas anchas, de estilo dramático; es una de esas colas que necesitan ayuda de otros para ser recolocada. Suele reservarse para celebraciones en lugares cerrados, pues la tela barrería cualquier grano de arena que se ponga a su paso. Su longitud es de 2,5 metros; eso sí, la espectacularidad que aporta la cola al vestido eleva la categoría de la ceremonia. El vestido Hannah está diseñado con una cola catedral.
- Cola de novia real o monarca:
La más larga, mínimo 3,5 metros de longitud. Su nombre se debe a la común presencia de este tipo de cola en los aristocráticos eventos. Lady Di y la princesa de Holanda Maxima Zorreguieta son algunas de las grandes que han vestido estas colas. El modelo Helada se aproxima mucho a la gran longuitud de cola que caracteriza a las colas reales.
Por supuesto, también puedes decantarte por un vestido sin cola. Las faldas evasé, de cortes asimétricos o con cortes rectos y fluidos suelen prescindir de la cola, pues la forma de las faldas en sí lucen por si solas sin necesidad de aportar longitud para hacer espectacular el vestido. Como el vestido Hemin que te presentamos.
En Penhalta podrás encontrar la cola para tu vestido de novia que desees. Nos adaptamos a tus gustos y a tus necesidades. Reserva tu momento, pide cita aquí: www.penhalta.com/esp/pide-tu-cita/
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Source: Penhalta
